InTeNtÉ LiArMe CoN uN gAy

Ahora sí que sí, reventé el cupo de veces posibles que una persona tiene para hacer el ridículo. Creo que el viernes fue la noche más surrealista de toda mi vida. Jugué al "Conejito de la suerte" (sí, ese juego infantil en el que tienes que besar al chico o a la chica que te guste más), un tío bisexual me declaró abiertamente que quería liarse conmigo porque le parecía guapísima y se quedó flipando cuando le rechacé porque tenía más pluma que una gallina (es el que yo creía gay y que nunca me llamó para ir a su fiesta), e intenté liarme con un gay... La cosa fue así:

Yo: Que sepas que si te besé mientras jugábamos es porque me gustas.

Él: Pero yo soy gay... ¿No lo sabías?

Yo: Aaaaah, pues no. (Me di la vuelta y deseé que la tierra me tragase. ¡Qué vergüenza, por Satanás! Mi radar busca hombres está atrofiado o los gays nos invaden...)

Espero que no se lo haya contado a nadie o mi reputación de chica dura quedaría por los suelos. Definitivamente voy a dejar de dar yo el primer paso porque no es lo mío...¬¬ Eso sí, fui declarada Chica Revelación 2010 y el chico que dio la fiesta me reclamó para todas las fiestas futuras, además de ser la chica más solicitada en el dichoso jueguito de los besos. Hasta mi amiga se mosqueó un poco porque su amigo me eligió a mí en lugar de a ella... ¡Ja! Pierdo un kilo y ya se me revolucionan todos... ;)

Con mi hermana estoy fatal. No nos hablamos desde hace días. Ella me considera una niñata y le dijo a mi madre que tenía que llevarme a "algún sitio" porque yo no estaba bien. No para de decir que necesito ayuda, pero ni una sola puta vez me ha ofrecido SU ayuda. Joder, que me vio los cortes en el brazo (y no es la primera vez) y me dijo que parecía que me había intentado cortar las venas. Dije que me había quemado con el horno, pero entonces vio las rayitas blancas que tengo de cortes antiguos y me preguntó que si también me había quemado ahí. Yo creo que sabe que me autolesiono, pero le importa una mismísima mierda.

La dieta va como el culo, yo creo que hasta he engordado. Entre las cervezas del viernes, los chupitos cada media hora, el picoteo y los atracones de ayer y de hoy, estoy algo deprimidilla. Sigo saliendo a correr, pero imposible equilibrar las calorías. Como quiero estar en 65 kilos el próximo viernes, que es cuando voy a la dietista, me voy a pasar por el forro de los cojones la dieta esta semana. Voy a estar comiendo cereales y un yogurt para desayunar y otro yogurt para cenar. Eso es todo. No hago ayuno porque no quiero el efecto rebote y porque quiero seguir haciendo ejercicio. Mañana empiezo a correr 25 minutos. La verdad es que el ejercicio sienta bien. Lo odio, pero reconozco que te da una visión diferente de las cosas, te hace sentir menos inútil, más optimista.

FaCtOr A

ABURRIMIENTO. Ése es el sustantivo que puede definir mi vida en estos momentos. Llevaba tres años fuera de mi tierra, viajando. Han sido tres años muy ajetreados, llenos de gente nueva, pensamientos diferentes, trabajos diversos, días con pocas horas y mi móvil siempre sonando. Y ahora vuelvo a mi casa y parece que nada ha cambiado. Estoy sola otra vez, no hago nada en todo el día, parece que el teléfono es mi nuevo complemento vistiendo y hasta me cansé de ver tele y leer (cuando antes tenía que sacar tiempo expresamente para ello)

Sé que fui yo la que decidió no hacer nada, pero ante este panorama y este futuro poco prometedor, estoy buscando un trabajo de lo que sea. Lo ideal sería ser profesora en una escuela infantil con un sueldazo, que para algo me diplomé, pero sinceramente me da bastante miedo debido a mi personalidad tornadiza, así que si tengo que volver a ser dependienta, pues lo seré, aunque espero que no sea de jornada completa porque es un coñazo.

También voy a apuntarme a varios cursos para desempleados, no tanto por aprender, sino por conocer gente, aunque he asistido a varios y los alumnos dejan bastante que desear...¬¬ Además quiero estar ocupada porque con todo este tiempo libre no hago más que pensar en comer y temo que algún día lo haga de manera compulsiva otra vez.

Hoy salí a correr y espero haber empezado una rutina diaria. Fue un poco cutre porque estoy desentrenadísma, pero el año pasado pasé de correr 20 minutos diarios a una hora en cuestión de dos meses. Supongo que este año lo haré igual.

Encima siento que no estoy bajando nada de nada. No sé si es porque el proceso va lento o porque me va a venir la regla y me estoy hinchando. Le dije a la dietista que el tiempo entre comidas se me hacía eterno y me dijo que si quería podía tomar el almuerzo y la merienda fraccionados. ¿Pero qué coño voy a fraccionar si mi merienda es una manzana y una galleta? Me imagino cortando la manzana en gajos y cogiendo uno cada cuarto de hora y me parece ridículo. Vaya puta mierda.

Ahora me voy a comprar lechuga y cereales y de paso voy a ponerme los dientes largos mientras veo toda la bollería y el chocolate, sólo porque soy masoquista.

OéOéOéOé...

Yuhooooooooo! ¡Bajé un kilo mi primera semana de dieta sana! Y no sólo eso, ¡sino que además perdí 1.5 centímetros de cintura y 3 de cadera! La dietista me dijo que podía salir con una sonrisa por la puerta, que lo había hecho genial. Y eso que fui sintiéndome una mierda porque ayer por la noche estaba cabreada y me di un pequeño atracón. Soñé incluso que había engordado, todo un trauma, pero ahora eso me servirá para no cometer el mismo error otra vez. ¿Y qué si sé que podría haber perdido el triple haciendo ayuno? ¿Y qué si disminuyo los platos de pasta y aumento los de ensalada? ¿Y qué si me siento culpable cuando como una aceituna de más? Estoy intentando hacer las cosas bien, pero todo cambio conlleva un período de adaptación, no puedo pretender cambiar mi forma de pensar en cuestión de días.

Quería aclarar algo sobre mi hermana. Leí de nuevo el post anterior y la verdad es que no la dejo en muy buen lugar. No es mala persona en absoluto y siempre estaré ahí para ella, pero admito que somos diferentes y que es bastante complicado (por no decir imposible) que nos llevemos bien la mayor parte del tiempo. Eso no quita el amor que siento y sentiré por ella y el que ella siente por mí. Reconozco que a veces escribo cuando estoy enfadada, la ira me ciega y digo barbaridades, pero no hay que tomarse todo lo que digo al pie de la letra, que conste. Por cierto, ayer me dijo que decía mucho lo de ponerme a dieta, pero que cuando adelgace seguro que me saco tres o cuatro fotos delgada y que luego me dedico a engordar nuevamente. ¡Cómo me conoce la cabrona! Es lo que llevo haciendo durante años, pero esta vez tiene que ser diferente, no creo que pueda soportar pasar por lo mismo otra vez.

Cambiando de tema, ¿conoces el programa de televisión "Mujeres y hombres y viceversa"? Resulta que una de sus exconcursantes, la mujer cañón de la foto, dijo que el chico que había conocido en el programa (un ser despreciable que no merece ningún respeto) y con el que se había ido a vivir durante dos meses, ¡¡¡¡¡¡¡¡la llamó gorda en varias ocasiones!!!!!!!! Al principio ni le prestó atención, pero reconoce que ya a la tercera o cuarta vez empezó a pensar en ello y pasó de pensar que estaba genial a mirarse al espejo con recelo y cenar ensaladas en lugar de pan. Y yo me pregunto, ¿cómo es posible que hasta una tía con semejante cuerpo pueda perder su autoestima por lo que le diga un tío cualquiera? ¿Cómo es posible que las tías seamos tan tontas de dejarnos influir tan fácilmente? Nos comen tanto la cabeza con que un cuerpo normal es medir 1.80 y pesar 50 kilos que al final no nos vemos bien ni cuando estamos en nuestro peso ideal. ¡Es de locos! Y la culpa es sobre todo nuestra, que cedemos ante la sociedad y los hombres e intentamos cumplir esos cánones absurdos sólo para agradarles. Es deprimente, en serio. Y luego me quedo pensando: ¿Qué diría el exnovio de esa concursante si me viese a mí? Más deprimente todavía.

¡Ah! Al final decidí que mi meta es 50 kilos, ni 57 ni hostias. Ahí me quiero parar. No veré a la dietista hasta dentro de dos semanas, pero si me veo con fuerzas me pesaré el próximo viernes en la farmacia, aunque sea con ropa, porque en casa no tengo báscula.

CoMo SaLiDa De Un CuAdRo

LA PALMA: Desastre. No hice más que discutir con mi hermana. La quiero muchísimo, pero no la soporto. Salió caprichosa, vaga y con la creencia de que siempre tiene la razón. Cuando Tenía una opinión diferente a la suya y se lo manifestaba de manera calmada y coherente, se cabreaba, se ponía borde, me decía que estaba loca y que necesitaba ayuda psicológica. ¡Será subnormal! No nos llevamos bien. Me di cuenta de que si quiero una relación tranquila con ella y mi madre, la única opción que tengo es tragarme todas mis opiniones y dejar que me falten el respeto continuamente. Ellas pueden hacer lo que les salga de los cojones, pero cuando hablo yo… ¡Satanás me libre! Por ejemplo. Mi hermana me dijo tres veces (no una ni dos, sino tres…) que le recordaba a las Tres Gracias de Rubens. Ya me lo había dicho antes y no es precisamente un halago, así que le respondí que por favor no dijese ese tipo de cosas cuando nadie le había preguntado. Que los piropos son aceptados siempre, pero los comentarios negativos sólo son bien recibidos cuando se pide sinceridad, no de manera espontánea. Nuevamente me calificó de loca y yo acabé superenfadada. No se puede ser educada con ella. Estoy harta de tanta ordinariez y poco civismo. Vale que donde hay confianza, da asco, pero todo tiene un límite. Además ella siempre va diciendo que no come mucho y la muy tragona no paró en todo el viaje: me recriminó por comprar un paquete de Donetes (¡era el primero en dos años!) y de los nueve que venían yo sólo me comí tres… ¡Ella se comió el resto! ¡Y el mismo día! Y luego, claro está, la delgada es ella.

DIETISTA: El mismo día que llegué de vacaciones fui a la dietista. Tengo que perder la friolera de 7 kilos para estar en mi peso (de 68 a 61), pero ni de coña voy a pararme ahí. Tampoco creo que quiera alcanzar los 50, pero al menos los 57 sí (mierda, 11 kilos de repugnante grasa). Me dijo que mi metabolismo basal era de 1489 calorías, por lo que me puso una dieta de 1250 calorías diarias. Me parece una barbaridad. Estoy comiendo incluso galletas Digestive con chocolate y pan para cenar. Y la coña es que la ansiedad sigue ahí, no ha desaparecido. El viernes tengo otra consulta y espero de verdad haber bajado de peso porque admito que de momento me está costando mucho no saltarme comidas o disminuir y aumentar las cantidades que tengo estipuladas. En teoría la dietista espera que pierda un kilo por semana.

FIESTA: El viernes pasado salí de marcha y estaba bastante preocupada por si veía al chico que me gustaba antes de salir huyendo de este sitio. No acabamos muy bien y no quería que me viese gorda, pero tuve la gran suerte de que al final fuimos a otra discoteca. Me reí mucho, a pesar de que no tenía mucha confianza con la gente con la que quedé. Nos encontramos a un chico en mitad de la noche que conocía a uno que estaba con nosotros y me dijo que le había caído muy bien, que tenía una fiesta en su casa al día siguiente y que le diese mi número para que fuese. Cuando nos despedíamos, me dijo “Te veo mañana” y cinco días después sigo esperando. Era gay, así que estaba convencida de que llamaría. No me cabía la duda de que al despertar pensara que ya no era tan guapa o tuviera recelo por si yo no contestaba. ¿Alguien me lo explica? ¿Por qué la gente pide números de teléfono si luego no van a llamar? Yo no cojo el número de nadie porque sé que no llamaré, pero tampoco obligo a nadie a que apunte el mío. Fue mi primera decepción en España…

Voy a ponerme al día con todos los blogs porque desde que volví el ordenador ha estado ocupado desde por la mañana hasta la madrugada, no he tenido opción de conectarme. Es una mierda.

MÁtAmE aHoRa Y aHóRRaMe DiSgUsToS

Estuve probándome todo mi armario. TODO. Y no tengo absolutamente nada para salir de fiesta. Estoy de los nervios:

1. Porque me voy a La Palma el lunes y no sé qué llevar. Tengo que decidirme ya y soy incapaz.
2. Porque el viernes, a la vuelta de mis vacaciones, quedé con una amiga y sus amigos para salir.

Pensé que iríamos a algún sitio con música comercial en donde yo jamás había estado, pero NO. Vamos a la sala de rock a la que yo iba siempre cuando vivía aquí, en donde conozco a todo el mundo y en donde voy a morir cuando me vean con todos los kilos de más. Encima no hago más que pensar en un chico con el que me lié antes de salir huyendo de este lugar, un chico al que considero perfecto pero del que pasé debido a mi puta locura. No quiero verlo, pero sé que si pienso mucho en él voy a acabar atrayéndolo con mi energía, me pasa a menudo, pero no puedo parar de hacerlo. He imaginado mil veces el volverlo a ver estando yo guapísima y delgadísima, no puede ser de otra manera, me niego.

¿Qué hago? ¿Cancelo? No puedo comprarme ropa porque el poco dinero que tengo es para la dietista (empiezo también el viernes, ¡qué ganas!) y la verdad es que me apetece salir, pero con este panorama... Además comprar ropa no serviría de nada, seguiría notándose que estoy más gorda (¿O acaso la ropa hace milagros?) Tampoco puedo decirles que cambiemos de sitio porque no conozco a la mayoría y aunque lo diga me mandarían a tomar por culo. Puede ser que al final él no esté allí, pero no quiero estar toda la noche obsesionada mirando de reojo la puerta como una lunática trastornada.

¡Qué mierda! No me creo que me esté pasando esto, no me creo que esté preocupada por esto a mi edad y con todas las cosas que tengo que arreglar en mi vida. Sólo de pensar en que pueda echarme esa mirada de "¿Qué te ha pasado? ¿Qué has hecho?", me da un ataque de pánico. Ayer estuve hasta las 5 de la mañana dándoles vueltas a la cabeza. Muy triste.

Me despido hasta el fin de semana que viene. Mañana estaré ocupada preparándolo todo y tengo que salir el lunes a las 6 para coger el avión. Espero que todas tengáis buena semana. ¡Disfrutad que yo intentaré hacer lo mismo! Si puedo, claro...

5 díAs

Eso fue lo que tardé en tirarme de los pelos a causa de mi familia. Se acabó el período de paz absoluta. Sigo estando bien, que conste, pero sin la sensación constante de tranquilidad, excepto cuando estoy sola...

Mi hermana estuvo tres días encerrada en su habitación depresiva porque hace un mes rompió con el novio. Sé que ella quiere volver, pero no hace más que arrastrarse. A mí se me muestra como una chica autosuficiente y madura que no cae en los típicos juegos macabros de pareja, pero a él no hace más que darle pena, victimizarse e intentar manipularle psicológicamente. Es muy triste. Más triste es que yo me haya enterado leyendo sus conversaciones privadas de Messenger (sí, no respeto la privacidad de mi hermana, ¿qué pasa?), pero es que quería saber a qué me enfrentaba cuando estuviese de vacaciones... Espero que no me comente el tema porque no estoy por la labor ni de mentir ni de animarla. Que después de todo lo que yo he pasado nunca he pagado mis problemas con ella, de hecho ni siquiera sabe que tengo problemas, y ante el problema más estúpido que tiene ella se evade con cara de perro y no dice ni hola cuando la saludas.

Aquí ya me estoy aburriendo. No tengo un duro y la poca gente que conozco no quiere salir. Coñazo. Encima me encontré con una antigua amiga del instituto. No quiero ser cruel, pero juro que es la chica más aburrida que jamás he conocido. Es buena persona y no tengo nada en su contra, ¡pero es sosa de cojones! Le dije que si quedábamos para tomar unas cervezas y ponernos al día y va la tía y me suelta que ella ya no bebe!!!!!! TRAUMA. ¿En serio? Porque cuando me vea a mí lo va a flipar. Y si encima tengo que aguantarla a ella sobria, voy bonita... Y coge y me dice: "Hombre, no te digo que nunca, dos o tres chupitos al año sí que me bebo." ¿¿¿¿???? ¿Qué puedo decir? ¡Mátame! Por lo menos estamos organizando una salida para el mismo día que vuelvo de mis vacaciones, no con ella, sigo con otra gente.

Por lo demás, no he salido correr porque sigo acatarrada y continúo comiendo en su justa medida. Me probé el bikini del año pasado y HORROR, quise morir, pero al menos me sirve (¿Es eso un consuelo?) Además vi fotos del año pasado y estaba monísima, con 8 kilos menos y siempre arreglada. Tampoco era una sílfide, nunca lo he sido, pero estaba a gusto y eso se notaba. Estuve un poco angustiada ese día, pero luego me paré a pensar que voy a volver a estar así, incluso mejor, que estoy motivada y no me voy a dejar vencer. Por cierto, está siendo toda una odisea el poder conectarme, siento no leerlas tan a menudo, ahora voy a ello.